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Me he jubilado y como a todos los viejos, me ha dado por filosofar un poco.
Como todo el mundo, yo también soy un caso excepcional de mala suerte y nadie ha reconocido nunca mi descomunal valía, y si no he tenido el éxito que me merezco es porque los demás sois una panda de ignorantes que no entendeís nada de nada, y todo esto sin hablar de las circunstancias que me han rodeado, siempre en mi contra.
Quiero decir con lo de arriba que yo soy sólo un estúpido 'normal', no se vayan a creer otra cosa.

No obstante...

... ahora que puedo y tengo tiempo voy a liberarme un poco de los fantasmas que aún tengo pegados a la ropa, una mera satisfacción personal porque este blog no lo lee ni el Tato.
Diré en primer lugar que he acabado bastante harto de algunas cosas:

Harto de los adivinos, los tiradores de rayas, los inventadores de sistemas y en general toda esa caterva de profesionales del no tengo ni puta idea de lo que me pregunta, pero contesto igualmente.
Harto de los súper economistas y sus análisis fundamentales. En realidad, son de la misma raza que los anteriores, pero mejor vestidos. Si los tiradores de líneas son capaces de tomarme el pelo con una simple raya en un papel, ¡Qué no serán capaces de hacer éstos con una hoja de cálculo!
Harto de los expertos, hay muchos, en opciones, en futuros, en swaps, en exóticas etc. etc. En realidad todos ellos son jugadores compulsivos, lo único que hacen es apalancarse en el mercado. La mayoría están sutilmente engañados por la aparente profundidad matemática del asunto, pero lo único que hacen es mover más dinero con menos, sólo eso.
Harto de los bancarios y las bancas privadas. Viven en su mundo con sencillas reglas: los muy buenos, nunca llegan, son detenidos por algún estamento intermedio, no vaya a ser que viendo al muy bueno lo despidan a él. Los buenos o medio buenos, llegan, pero tampoco les sirve, porque los de arriba son incapaces de entender aún lo sencillo. Los malos, no necesitan entrar, ya están dentro. ¿Entiende usted ahora lo de las preferentes, lo de los swaps y todo eso?

Recuerdo vagamente estar harto de muchas más cosas, pero se me están olvidando, cosas de la edad supongo.
Por cierto, si ya está usted harto de alguna de estas cosas -que no me extrañaría-, le ruego que no se corte. Como tendría que darse de alta para poner a parir a alguien en esta página, (sea a mí mismo o a otros), tal vez no le apetezca verse involucrado, entonces, envíeme un correo anónimo en la forma que explico abajo y le garantizo que lo publicaré aquí con mi propio nombre haciendo referencia al alias que usted haya tenido a bien enviarme.

No me resisto

Ya no puedo hacer otra cosa que patalear, los de Hacienda no me dejan facturar un duro. Por todas estas cosas, he decidido mostrarles los resultados de un modo de ganar dinero, sin inconvenientes, sin tonterías y con total eficacia.

MIS INTENCIONES

Se lo voy a contar a las claras: me mueve lo que se dice ‘el recurso del pataleo’.
Como no me han valorado en ningún lado escribo esta entrada del blog esperando que a un número 'decente' de ustedes les interese. En realidad con un par de docenas me conformaría.
Una vez que los tenga, les voy a enseñar gratis a todos y cada uno de ellos cómo se hace para ganar lo que muestran los gráficos de abajo, o lo que es lo mismo cómo se gana muchísimo dinero.
Francamente me importa un pito que ustedes ganen dinero o no, pero si les muestro cómo puede hacerse sin recurrir a los que me tienen harto, a ellos sí que les va a fastidiar, y eso es lo que yo quiero.
Ya, ya sé que una pulga no puede parar un tren, pero… puede llenar de ronchas al maquinista. Me conformo con eso.
Lo único que les pediré es que, cuando les vaya muy bien y confíen en lo que voy a enseñarles, colaboren con mi causa y publiciten su experiencia todo lo que les sea posible, enseñándosela a otros para que ninguno de ellos vuelva a hacer caso a los de la lista de arriba.

¿CÓMO?

Muy sencillo, simplemente escríbame un correo electrónico para poder comunicarnos.
No me importa su nombre, ni ninguno de sus datos, de modo que ya puede montar uno tan raro como quiera y con el nombre que le dé la real gana.

VEA LO QUE LE ESPERA